En base a un boceto en el que José Caballero dejó escrito que se trataba de un trabajo para una vidriera para el Banco Central, contactamos con los actuales inquilinos de la antigua sede del Banco Central, el Instituto Cervantes, situada en el Edificio de las Cariátides en la calle Alcalá esquina Barquillo de Madrid.
Gracias a su generosa colaboración pudimos comprobar que la vidriera que pudiera ser atribuida a Caballero no lo era en ningún caso, la vidriera estaba firmada por otro artista llamado Rogent, que trabajó para la empresa vidriera Bonet de Barcelona.
En cuanto podamos intentaremos averiguar el misterio de la gran similitud en cuanto a temática (alegorías de actividades productivas) y la disposición de los personajes en tres niveles horizontales, con figuras tumbadas, que existe entre el boceto de Caballero y la obra final de Rogent/Bonet.
Queremos agradecer la colaboración prestada al Instituto Cervantes y especialmente a Santiago González Laborda, arquitecto responsable de la unidad de obra y mantenimiento de la institución.
Y muy especialmente queremos agradecer también al doctor Oscar Da Rocha Aranda, profesor de Arte Contemporáneo del Instituto de Humanidades Francesco Petrarca, su inestimable y generosa ayuda en clarificar la autoría de la vidriera.
Instagram: @fundacioncaballero